Cineastas bolivianos tienen su Ley después de 50 años 

El vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Álvaro García Linera, presentó y entregó en el hall de la Casa Grande del Pueblo la Ley Nº 1134 del Cine y Arte Audiovisual Bolivianos, promulgada por el presidente Evo Morales; a partir de la fecha corre un plazo de 90 días para su reglamentación.

“Después de 50 años, por fin Bolivia tiene una ley del cine que es un producto no tanto del Estado sino de los productores, que han sentido la necesidad de regular y fomentar el cine. (…) el 99% de esta ley ha sido trabajada por los productores”, sostuvo el vicepresidente.

La norma pretende que exista soberanía cinematográfica y audiovisual y manda que el pueblo boliviano sea el propietario del patrimonio documental fílmico y audiovisual.

Por su parte, la Ministra de Culturas y Turismo Wilma Alanoca, dijo que se trabajó por más de cuatro años en la construcción de la norma y mencionó a sus antecesores en el cargo que hoy ocupa, Pablo Groux y Marko Machicao, por haber sido parte de esa construcción.

“A través de la presente ley se establecerán políticas, instrumentos y mecanismos de acción que contribuyan en forma integral a fomentar, desarrollar, proteger, promocionar la actividad cinematográfica y arte audiovisual bolivianos en sus diversas formas de producción, distribución y consumo” sostuvo Alanoca.

La ministra aseguró que inicia un nuevo reto tras un proceso que no ha sido fácil. “Pero hemos puesto el bien mayor por encima de todo”, agregó.

El Ministerio de Culturas y Turismo ha decidido encarar una propuesta de Ley que permita al Estado Plurinacional de Bolivia reconocer la actividad audiovisual y cinematográfica como parte de un proceso de transformación social, que otorgue soberanía cinematográfica, en el marco del derecho a la comunicación, información y la libertad de expresión; permitiendo el fortalecimiento de las identidades culturales, el diálogo intracultural e intercultural, la defensa de la democracia, la descolonización y despatriarcalización.

La nueva Ley prevé registrar las obras nacionales y extranjeras para su distribución en el país, otorgar licencias de filmación, gestionar la producción y coproducción, y proteger los derechos de los autores de los filmes, tener cuotas de pantalla, entre otras acciones concretas.

Se creará la Agencia de Desarrollo del Cine y Audiovisuales Bolivianos (ADECINE), institución que contará con un Consejo Asesor, integrado por dos representantes del sector cinematográfico y audiovisual propuestos por los subsectores de: realizadores y guionistas, trabajadores técnicos, productores, distribuidores y exhibidores y cine indígena.

“Durante 50 años los cineastas bolivianos hemos esperado por esta ley del cine, los cineastas y la sociedad la necesitamos, porque el arte tiene el misterioso oficio de llegar a las verdades que no llega la lógica ni la ciencia, porque escudriña en la profundidad del espíritu de los pueblos ya sea rescatando memorias escondidas u olvidadas, o enfrentando a los tiranos y fascistas”, dijo Jorge Sanjinés a tiempo que aseguró que con la nueva norma se sentarán bases de un nuevo cine boliviano.

El objetivo de la ley es otorgar impulso y fortalecimiento a la cadena productiva de la cinematografía y arte audiovisual boliviano, fomentar la formación de una cultura fílmica y la integración de la producción boliviana en los circuitos internacionales, incentivar la realización de festivales, muestras, programas de formación y otras actividades vinculadas al cine y arte audiovisual a nivel nacional e internacional y promocionar a creadores y creadoras emergentes de producciones, entre otras.

“Es un sueño hecho realidad desde hace muchos años, hemos tenido una organización en diferentes gremios y sectores y hemos logrado que sea una ley de fomento que fomente a la cadena cinematográfica y se cree de alguna manera un repositorio de parte del Estado, resolver la deuda histórica con los cineastas que han aportado mucho con sus obras y tiene un valor importante y ahora solo queda trabajar en el reglamento”, sostuvo Mela Marquez Directora Ejecutiva de la Fundación Cinemateca Boliviana.

Entre sus fines se establece: Promover el crecimiento sostenido y dinámico de la actividad cinematográfica y audiovisual en el país, precautelando la soberanía audiovisual; promocionar el territorio nacional y los servicios cinematográficos y audiovisuales para atraer rodajes y producción de obras cinematográficas y audiovisuales, Promover la protección, conservación, preservación y divulgación de diferentes formas y modos de producción de la cinematografía y el audiovisual boliviano, entre otros.