Algunos manifestantes han asaltado el Arco del Triunfo con escribiendo con pintura «los ‘chalecos amarillos’ triunfarán»

Los primeros ‘chalecos amarillos’ comenzaron a llegar hoy a los Campos Elíseos, protegidos por un amplio dispositivo policial con controles e identificaciones que unas 150 personas intentaron forzar ya esta mañana, lo que llevó a las fuerzas del orden a responder con gases lacrimógenos. La policía ha detenido a un centenar de personas y ha interrogado al menos a 107, según datos del Ministerio del Interior francés.

En uno de los accesos a la plaza donde se encuentra el Arco del Triunfo, en torno amedio millar de personas, según las autoridades, intentaban entrar a primera hora vestidos con chalecos amarillos, la prenda que los conductores deben utilizar en carreteras y que el movimiento contra el alza de impuestos al carburante ha tomado como propia. Los manifestantes han lanzado además pintura amarilla contra los antidisturbios. Desde las 6:00, la arteria parisina está cerrada al tráfico y sujeta a un perímetro policial para evitar el desbordamiento.

Algo menos de de 36.000 manifestanteshan salido a las calles en el país, 5.500 de ellos en la capital. El primer día de protesta nacional, el 17 de noviembre, contó con 282.000 personas mientras que el segundo descendió a 106.000, incluyendo unos 8.000 en París.

El epicentro esperado de la movilización se ha llenado de furgones policiales y el acceso de peatones ha quedado sujeto a controles de identidad y registros de equipaje. Según la Prefectura de Policía, al menos 122 personas han sido ya detenidas, algunos de ellas por llevar objetos no permitidos en la avenida – susceptibles de ser usados con violencia – , y 107 han sido interrogadas. Las autoridades intentan evitar que se repitan las escenas de violencia del sábado pasado.

Poco antes de las 8:00, cientos de personas ya estaban reunidas al pie del Arco de Triunfo, ataviadas con los chalecos amarillos, símbolo de su desafío. Otros llevaban máscaras para protegerse de los gases lacrimógenos, frente a unan barrera de seguridad que bloqueaba por completo la avenida.

El primer ministro francés, Édouard Philippe, ha denunciado el asalto al Arco del Triunfo durante la manifestación. «Quiero decir lo mucho que me ha sorprendido este cuestionamiento a los símbolos de Francia: el hecho de que el Arco del Triunfo haya sido marcado, de que alrededor de la tumba del soldado desconocido pudiera tener lugar una manifestación. No estoy contento con estas imágenes, me sorprenden», declaró Philippe. Los alborotadores forzaron las barreras que rodeaban el monumento yescribieron con pintura en él: «Los ‘chalecos amarillos’ triunfarán».

El ministro del Interior, Christophe Castaner, y su secretario de Estado, Laurent Nuñez-Belda, acudieron a la avenida de los Campos Elíseos alrededor de las 8:30 para saludar a la policía. Hacia las 11 de la mañana el ministro del Interior contabilizaba 1.500 manifestantes a los que calificaba de «alborotadores», a los que no habían dejado fuera del perímetro, frente a 200 «pacíficos». «Nuestras fuerzas policiales están presentes y repelen a los matones: ya ha habido 39 arrestos«, añadía.

«Nuestra responsabilidad es asegurarnos de que todo salga bien», dijo Castaner, una semana después de los excesos de la manifestación anterior en los Campos Elíseos. Por temor a los incidentes, se colocaron paneles de madera en algunas ventanas.

El ministro Castaner ha ha abogado por la «estructuración» y «organización» de la ira. «Debemos aceptar el diálogo», agregó, mientras el gobierno lucha por establecer un vínculo con este movimiento.

Los ‘chalecos amarillos’ -en referencia a la prenda fluorescente que portan los manifestantes, que es obligatoria en Francia llevar dentro de los vehículos- forman un movimiento social sin estructura y sin líder, organizado a través de las redes sociales. Protestan contra el aumento del precio de los combustibles. A pesar de los anuncios del presidente Emmanuel Macron, que prometió el pasado martes ajustar la subida de impuestos al precio del petróleo y aumentar las primas de conversión para salir de los vehículos contaminantes, entre otras medidas, los manifestantes han decidido repetir la marcha. Exigen que el Gobierno renuncie al nuevo gravamen que se aplicará a partir de enero al diésel y la gasolina, de 6 y 3 céntimos, respectivamente, punto en el que el Ejecutivo se ha mantenido firme hasta el momento.

«Cólera legítima»

Quince días después del nacimiento de los ‘chalecos amarillos’, las autoridades observan al detalle la magnitud de esta nueva movilización.

A pesar del anuncio por parte del jefe de estado Emmanuel Macron de los próximos pasos para responder a la «ira legítima» de los manifestantes, el movimiento que se ha extendido fuera de cualquier marco sindical o político todavía muestra signos de dinamismo.

Pese a estas tensiones, el movimiento sigue cosechando un apoyo muy diverso. Tres grupos de suburbios han llamado a la unión a los ‘chalecos amarillos’ en París para defender los «barrios populares».

Del lado del extremo, el movimiento Acción Francesa afirmó a AFP que esperara al menos 300 simpatizantes en los Campos Elíseos, mientras que el grupo de identidad «El Bastión Social» invita a sus «afines» a visitar la capital.

También se planea una «reunión de artistas» frente al Olympia Hall a las dos de la tarde, por iniciativa del humorista Gérald Dahan.

Ante el riesgo de enfrentamientos, otros grupos han preferido manifestarse bloqueando el tráfico en carreteras de diversos puntos del país y los alrededores de la capital. También se planean manifestaciones y bloqueos en varias ciudades como Burdeos, Agen, Toulouse o Pau.

Fuente: Agencias de París