Gobierno destina a salud solamente 8.9% del gasto público • Haití asigna 9.5% en el presupuesto del Estado, Argentina 13,7 %, Perú 15,6 % y Costa Rica 26%

En Bolivia alrededor de cuatro millones de personas, sobre un total poblacional de algo más de 11 millones de habitantes, carecen de servicios de salud y se hallan desprotegidas de los riesgos de enfermedades.

En la región, Bolivia es el país que menores fondos destina para la atención de salud de su población e incluso el presupuesto de Haití es mayor respecto del país.

“Notablemente, el porcentaje del gasto público de Bolivia en salud es incluso inferior al de Haití (9.5%), y tan solo la mitad del porcentaje asignado por los estados de Chile y Perú (15.6%)”, evaluó un estudio de la Fundación Milenio ¿cuánto gasta Bolivia en la salud de la población?.

“Se patentiza así la baja prioridad que el Gobierno boliviano asigna al sector de salud. En el contexto latinoamericano, Costa Rica destaca por tener una cobertura universal de salud y un gasto del orden del 26% del total del Gobierno”.

La población que cotiza el 10% de su salario es de alrededor de un millón y medio de trabajadores; tal es el segmento de personas que con su aporte financia su atención y la de sus dependientes. La relación Población Protegida por Afiliado es de 2,70 resultado de la población de 4 millones de beneficiarios versus 1.48 millones de trabajadores activos aportantes. El aporte por persona (per cápita) anual es de Bs 2.799 equivale a $us 402 por cada afiliado.

SISTEMA DE SALUD

El sistema público de salud aglomera al 83% del total de establecimientos existentes en el país, en tanto que el 5.5% de estos pertenecen al sistema de seguridad social, el 10% son centros de salud de la Iglesia, ONGs y del sector privado.

El gasto insuficiente que Bolivia destina a los servicios de salud explica, en parte, el rezago de los indicadores en el territorio nacional. Así, la esperanza de vida de la población boliviana es cinco años más baja que la del conjunto de América Latina.

Aunque el Gobierno anunció que la esperanza de vida se incrementó en el país, en los últimos años, debido a las políticas implementadas.

“El Seguro Nacional de Maternidad y Niñez (SUMI) ha contribuido a reducir la mortalidad materna en el país. Antes del funcionamiento de este seguro público, en 1989, la tasa de mortalidad materna por cada 100.000 niños nacidos vivos alcanzaba a 416, mientras que en 2015 prácticamente se redujo a la mitad, llegando ese año a 206. Así y todo, la mortalidad materna sigue siendo el triple de la que se registra en América Latina”, señala el documento.

El gasto social del sector público, como porcentaje del PIB, se incrementó entre 2004 y 2014. Los datos de 2014 muestran que el gasto social se repartió de la siguiente forma: 8,7% a educación, 5,8% en protección social, 4,30% en salud, 1,7% en vivienda y servicios comunitarios, 1,07% en actividades recreativas y cultura, 1,08% en protección ambiental.

El presupuesto en el área de la salud, como porcentaje del PIB, entre 2003 y 2013, registró un promedio de 5.3%, siendo uno de los más bajos en América Latina. Sorprendentemente, dicho porcentaje fue incluso inferior al 6.3% registrado al comenzar la primera década del siglo XXI; esto es, antes de la bonanza de ingresos fiscales que la economía boliviana experimentaría en el período 2004 y 2014, y que lamentablemente no se ha reflejado en un crecimiento sustancial del gasto en salud.