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Política

Cabildo de cívicos en La Paz asegura independencia política y dicen ni Mesa ni Evo

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(Infodiez-01/11/19)

El cabildo autodenominado nacional que se realizó en La Paz la noche del miércoles determinó en uno de sus puntos dejar de lado y restar su apoyo al candidato perdedor de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, y aseguró la independencia de los entes cívicos de siete departamentos que participaron en ese mitín.

«Ratificar la independencia política de las organizaciones cívicas, obreras y populares frente a este gobierno y decir ni Mesa ni Evo Morales», dio lectura a la resolución cuarta de ese cabildo una de las representantes de las organizaciones cívicas.

Con esa determinación Mesa quedó sin respaldo de sus, hasta hoy, aliados de las movilizaciones que buscan desconocer los resultados de las elecciones generales que dan la victoria por más de diez puntos porcentuales al presidente Evo Morales.

La concentración que se desarrolló en la avenida Montes a la altura de la Cervecería Boliviana aprobó esta moción planteada por quienes dirigen las movilizaciones que ahora buscan sacar del Gobierno a Morales con la anulación de las elecciones, a sabiendas que es una acción inconstitucional en una clara contradicción a su supuesta «defensa de la democracia».

Mesa, perdedor de las elecciones, primero se atribuyó el derecho a disputar una segunda vuelta contra el gobiernista Movimiento Al Socialismo (MAS) sin esperar el cómputo oficial de votos; luego demandó una auditoría internacional por sospechas de fraude y, ahora, pide desconocer los resultados de las elecciones generales.

La movilización en La Paz que definió retacear la convocatoria de Morales a una pausa en las movilizaciones hasta que la Organización de Estados Americanos (OEA) culmine con el trabajo de auditoría integral.

Como prueba de esa radicalización un grupo de choque que participó de ese cabildo se dirigió a las distintas esquinas que rodean la plaza Murillo, con la intención de ingresar al centro político de la sede de Gobierno y tomar la Casa Grande del Pueblo, extremo que fue controlado por efectivos de la Policía Boliviana que por más de 30 minutos resistieron los embates de esa turba.

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