IBNORCA aclara que certifica calidad de Oxígeno, pero no regula su venta 

La Paz Bolivia 17 de agosto de 2020

Cualquier empresa puede obtener una certificación de IBNORCA de manera voluntaria, lo cual no significa un aval para su comercialización

El Instituto Boliviano de Normas y Calidad (IBNORCA) aclaró que las normas que aprueba para la obtención, buenas prácticas de manufactura y seguridad en la manipulación y transporte de oxígeno medicinal, no prohiben a ninguna empresa o institución, pública o privada, la comercialización del producto, sino que se limitan a certificar la calidad en el proceso de producción del mismo

“Se trata de normas técnicas, que consideran la totalidad del proceso de fabricación del oxígeno, su envasado y procedimientos de distribución, pero que no establecen criterios de comercialización. Además, cualquier empresa productora puede obtenerlas voluntariamente”, afirmó Daniel Sánchez, presidente del Directorio de IBNORCA.

Sánchez destacó que la aprobación de la normas no es atribución exclusiva de IBNORCA, sino que son realizadas por el Consejo Nacional de Normalización (CONNOR) y otras instancias, integradas por representantes del sector público y privado.

La norma 73001 considera los procedimientos para la obtención de gases comprimidos y oxígeno medicinal, la 73003 las marcas de identificación del contenido y de los riesgos inherentes y la 73004 las buenas prácticas de manufactura.

En Bolivia la aplicación de este tipo de normas es voluntaria, pero en el caso del oxígeno el Ministerio de Salud o las agencias estatales de compras de medicamientos, pueden exigir el cumplimiento obligatorio de las mismas en los procesos de licitación para la compra de este tipo de productos.

“Ibnorca no es una organización reguladora, por lo que no tiene competencia para prohibir o autorizar la venta del producto”, aclaró Sánchez.

En los últimos tres años, IBNORCA dio servicios a una decena de empresas productoras de oxígeno medicinal de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, Oruro, Tarija y Sucre.

“IBNORCA no decide quién puede o no puede vender, como lo han insinuado algunas personas interesadas. Simplemente ofrecemos nuestros servicios para que las empresas certifiquen productos o servicios bajo estándares internacionales”, concluyó.