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La pesadilla de Ana Carola en Sri Lanka: boliviana reclutada por ‘narcos’ que se enfrenta a la horca

Según las investigaciones aduaneras, dadas a conocer por el portal Daily Mirror de Sri Lanka, era el primer viaje al exterior de la boliviana.

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Foto- Droga

La Paz 19  marzo 2023

Tiene 26 años y su vida pende de un hilo. Ana Carola C.F., madre boliviana de dos niños, fue captada por una red de narcotraficantes que le ofreció 500 dólares por llevar cocaína líquida impregnada en la ropa de su equipaje a Sri Lanka, país insular ubicado en el continente asiático donde el narcotráfico se castiga con la pena capital. Ni bien arribó al Aeropuerto Internacional de Bandaranaike fue detenida por agentes aduaneros adscritos a la Unidad de Control de Estupefacientes que encontraron 4.6 kilogramos de droga en su maleta. Eso ocurrió el pasado 1 de marzo y, desde entonces, está siendo procesada por tráfico de sustancias controladas. La joven podría ser condenada a muerte, pero el Gobierno de Bolivia hace seguimiento a su caso para evitar la horca.

Ana Carola, oriunda de Montero (Santa Cruz), tiene dos hijos, una de nueve años y otro de seis. Emprendió el viaje, a finales de febrero, diciendo que iba a trabajar en Brasil, pero no dio más detalles. Dejó a sus niños al cuidado de su prima. A su madre, Matilde, diagnosticada con cáncer de cuello uterino, no le hizo conocer que estaba saliendo del país, probablemente para no angustiarla. La última vez que habló con ella fue el 26 de febrero.

Como la mayoría de las mujeres usadas como “mulas” del narcotráfico, Ana Carola es madre soltera. Realizaba trabajos temporales y vendía distintos productos en las calles. Le prometieron 500 dólares por hacer ese viaje, monto que no equivale ni a dos salarios mínimos en Bolivia. Sin embargo, cercanos a ella manifestaron que se encontraba desesperada porque tenía deudas, su madre estaba enferma y debía pagar el alquiler y cubrir la alimentación y educación de sus hijos.

Según las investigaciones aduaneras, dadas a conocer por el portal Daily Mirror de Sri Lanka, era el primer viaje al exterior de la boliviana. Se trataba de su primer permiso de vuelo emitido por el Gobierno boliviano en el mes.

Ana Carola se encuentra a poco más de 16 mil kilómetros de distancia. En cuanto a la diferencia horaria, Sri Lanka está nueve horas y 30 minutos por delante de Bolivia.

Los detalles del viaje que cambió la vida de la boliviana aún se desconocen. Ana Carola voló desde Brasil con la droga. Pasó por Dubái y luego arribó en el Aeropuerto Internacional de Bandaranaike en un vuelo de Emiratos, EK 650.

Según su testimonio, hacia las autoridades de Sri Lanka, una persona debía aguardar su llegada y recibir el equipaje con droga en el edificio de la terminal del aeropuerto de Katunayake, informó la subdirectora de Aduanas y vocera de prensa, Sudatta Silva.

“La mujer sospechosa llegó al país procedente de Dubái con una sola bolsa. Los funcionarios de aduanas encontraron que la ropa, las telas y partes de la bolsa de tela, incluidos los bolsillos, estaban empapados en líquido de cocaína, y este caldo de cocaína estaba preparado. Trajo como solución”, dijo la vocera.

Para la División de Control de Estupefacientes de la Aduana de Sri Lanka, la concentración de cocaína que transportaba la boliviana es bastante alta. El stock de cocaína está valuado en 230 millones de rupias equivalente a 635 mil dólares.

Los narcotraficantes se las ingenian para camuflar la droga. Lo último en este negocio ya no parece ser ingerir cápsulas o esconder la sustancia ilícita en cargamentos, sino hacerla irreconocible buscando que sea indetectable, pero no siempre logran su propósito. En este caso, la cocaína estaba oculta entre la ropa y equipaje de Ana Carola. Se usó un químico especial para separar cuidadosamente los paños empapados y luego del proceso de lavado y filtrado obtuvieron 4.6 kilos de cocaína.

“ESTOY CONDENADA A PENA DE MUERTE”

Ana Carola se comunicó dos veces con sus familiares. La madrugada del 3 de marzo llamó a su prima. Le hizo conocer que había sido detenida en Sri Lanka con droga.

11 días después, el 14 de marzo, habló con su comadre. “Soy Carola, estoy presa, me han dado 25 años de prisión con pena de muerte”, fueron las palabras que la mujer escuchó a través de la llamada telefónica que recibió al promediar las 07:15. La boliviana le encargó el cuidado de sus hijos antes de cortar la comunicación.

Su comadre devolvió la llamada, pero no recibió respuesta. Para sus seres queridos, la red de “narcos” se aprovechó de su desesperación. No sabían que estaba realizando ese viaje influenciada por personas dedicadas al narcotráfico. Desconocen quién o quiénes son sus captores.

La familia vive una pesadilla. Matilde, madre de Ana Carola, ya no puede conciliar el sueño. La mujer se llevó a sus nietos a su hogar, quienes comenzaron a preguntar por su madre. “Lo único que pude decirles es que su mamita está trabajando lejos y que pronto volverá”.

ESPERANZAS

La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, confirmó el viernes que Ana Carola está detenida, pero no tiene una sentencia.

La Embajada del Estado Plurinacional de Bolivia en India concurrente con la República Democrática Socialista de Sri Lanka, en el marco de las atribuciones dispuestas en el artículo 5 de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares y el artículo 19 de la Ley No. 465 del Servicio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional, se encuentra realizando las gestiones de asistencia y protección consular para la ciudadana boliviana detenida por tráfico de sustancias controladas.

El Gobierno realiza seguimiento al caso de Ana Carola para velar por el debido proceso y garantizar sus derechos fundamentales. Matilde pide que su hija sea extraditada y que cumpla su condena en Bolivia.

Sola y alejada de sus seres queridos, Ana Carola enfrenta la causa por tráfico de sustancias controladas. Víctor y Magalí, bolivianos, atravesaron por circunstancias similares en Malasia, pero se salvaron de la horca. /// Periódico Opinión

 

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