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Represión policial-militar deja 3 muertos y 15 heridos en Senkata El Alto 

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(El Alto 19 de noviembre) Deivid Posto Cusi, de 31 años, Edwin Jamachi Paniagua y una persona no identificada son las víctimas fatales de la intervención policial-militar en Senkata, El Alto, mediante la cual se habilitó paso para que un convoy de combustible descienda hasta La Paz.

Un grupo de personas reclama a militares de una de las tanquetas que llegó hasta Senkata, El Alto, para escoltar el convoy de cisternas.

“¡Nos están matando!”, alertó un vecino en cercanías de la planta de hidrocarburos de Senkata, en El Alto. Se confirman tres muertos y 15 heridos es el saldo de la refriega suscitada en medio del operativo policial-militar que este martes se activó para el traslado de un convoy de cisternas con combustible hacia La Paz.

Deivid Posto Cusi, de 31 años, Edwin Jamachi Paniagua y una persona no identificada son las víctimas fatales de la intervención; dos de ellos fallecieron por disparos de bala y del tercero aún no hay datos, de acuerdo con un informe de la Defensoría del Pueblo.

La tensión ha vuelto al lugar y hasta después del mediodía continuaban los intentos de dañar el perímetro del centro de carburantes en medio del estruendo de explosiones y de disparos. Según versiones de los vecinos, los fallecidos son más.

Poco después de las 10.30 se activó el plan para dispersar y reprimir a sectores sociales que cumplen un bloqueo en el sector y que demandan la renuncia de la presidenta Jeanine Añez, quien asumió el poder tras la renuncia de Evo Morales. La sede del Dobierno estuvo sin combustible unos tres días.

Hubo gasificación y, según versiones de testigos, también se escuchó el zumbar de disparos de bala. En las redes sociales circularon videos de los heridos, a dos de ellos se los ve muy maltrechos y aparentemente sin signos vitales.

En un video publicado por una radio alteña, dos mujeres en medio del llanto le reclaman a un grupo de policías por qué impiden que se rescate al fallecido, a lo que uno de los uniformados le responde: “Vamos a hacer la autopsia de ley, vamos a saber por qué ha muerto”.

 

Hasta el Hospital Boliviano Japonés del Distrito 8 llegaron 10 personas heridas (se presume por impacto de proyectil), de los cuales dos eran de gravedad por lo cual fueron traslados a otros centros de salud, según otra radio local. Mientras que en el hospital de el Kenko se contaron otros cinco.

El médico Aiver Huaranca, con la voz quebrada, contó que las fuerzas combinadas no respetaron ni su uniforme de médico puesto que los proyectiles también fueron en su contra. Urgió ayuda debido a que no hay personal médico en la zona.

“Es muy triste lo que está pasando acá, en el Distrito 8, en el momento que yo le estaba atendiéndole los primeros auxilios que él se merecía he recibido también los disparos, no pueden reconocer cómo es un médico cuando está con uniforme y está atendiendo a los heridos”, denunció el galeno.

Afirmó que le lastima “ver a un compañero morir en esa forma porque murió en mis manos, ver que es un tiro de bala que se adentraba en el corazón, qué triste, pido en este momento a todo el personal médico, enfermeras vengan a colaborarnos acá no tenemos médico, estoy solo” y luego cuestionó: “¿Dónde está Bomberos, la Cruz Roja?”.

En otro video que circuló en las redes sociales se ve cómo militares apuntan sus fusiles hacia la movilización y se escucha la percusión del proyectil.

También se reportó que un equipo periodístico de la estatal Bolivia Tv fue agredido cuando intentó ingresar a la zona del conflicto. «Le prenderemos fuego, esta es la cámara de Bolivia Tv», afirmó uno de los que protagonizó el hecho en otro video que circuló en las redes sociales.

Tras la salida del convoy volvió la tensión en lugar. Los movilizados reactivaron los puntos de bloqueo con fogatas ante la molestia por lo sucedido. Otro grupo intentó nuevamente dañar la pared con la cual se resguarda la planta y logró derribar una parte.

 

En el otro extremo de la urbe, en la zona de Río Seco, otro grupo de vecinos molestos comenzó a apedrear algunos vehículos que circulaban en el lugar por romper el paro de actividades convocado por una coordinadora que articula las protestas en ese sector. Fuente: La Razón

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