CAPTURAS DE PANTALLA EN LAS QUE SE OFRECEN LA VENTA DEL ÓRGANO A TRAVÉS DE WHATSAPP Y FACEBOOK. RRSS

Basta con escribir “venta de riñón” en el buscador de Facebook para que una lista de anuncios de ese tipo se despliegue en la pantalla. Hay unos que ofrecen en venta su órgano y otros que están en búsqueda de un proveedor. Aunque la Ley 1716 prohíbe la comercialización de órganos, el internet se ha convertido en el “mercado negro”. La mayoría de los ofertantes argumenta la transacción a una urgencia económica y pide entre 5 mil y 15 mil dólares.

Las aplicaciones más usadas para consolidar el trato son las de mensajería como Messenger y WhatsApp. Algunos optan por las llamadas telefónicas.

“Buenos días, dono mi riñón por compensación económica. Soy de tipo de sangre O-Rh positivo. Favor seriedad”, escribió en un grupo de donantes de WhatsApp un joven de 28 años de Cochabamba, el pasado 26 de octubre.

OPINIÓN se contactó con el tratante quien pidió 15 mil dólares por acceder al trasplante. “Es un precio básico y módico. Espero su comprensión”, escribió. Añadió que atraviesa una situación económica difícil y que comprará un auto con ese dinero. “Busco una herramienta de trabajo para pagar mis deudas”.

Comentó que también su esposa se sometería a los exámenes a fin de garantizar la compatibilidad con el “receptor”. Incluso propuso bajar el precio para cerrar el acuerdo.

En ese grupo, en 24 horas, seis personas ofrecieron someterse a la cirugía de trasplante de órgano a cambio de dinero. Otro joven con el mismo tipo de sangre, pero de La Paz, pidió 10 mil dólares. Agregó que puede trasladarse a otro departamento para realizarse pruebas de laboratorios si el beneficiario lo requiere. “Tengo disponibilidad de tiempo”.

Elizabeth P. publicó el 18 de octubre, en un grupo de empleo en Facebook: “Me veo en la necesidad de vender mi riñón. Si alguien está interesado puede contactarme inbox (servicio de mensajería)”.

Antes, una persona que se identificó como Jean You (sin foto de perfil) posteó: “Alguien que esté interesado en vender su riñón comunicarse inbox. Es para salvar la vida de un niño que está en México. Será compensado con 30 mil dólares”. El anuncio superó los 60 comentarios. Unos mostraban interés, mientras otros rechazaban la propuesta. En la mayoría de las publicaciones, el que efectúa la oferta pide que se lo contacte a través de un mensaje privado y en su perfil coloca fotografías de animales, paisajes u otros conceptos.

CONTROL Para el responsable del Programa Renal del Servicio Departamental de Salud (SEDES), Ramiro Coca, no existe la venta de órganos. Argumentó que es una ilegalidad y que, de verificarse, sería penado. “Esto (la venta de riñón) está fuera de ley (…). No se lleva a cabo porque deben cumplirse varios requisitos antes del trasplante”.

De acuerdo a la resolución ministerial No. 245, hay cinco requisitos para ser donante. En la carpeta irá una solicitud de acceso quirúrgico, certificado de nacimiento original del receptor y el donante vivo compatible hasta el cuarto grado de consangüinidad o cónyuge, fotocopias de cédula de identidad (ambos) e informes médicos y exámenes; además de un examen psicológico o psiquiátrico de un hospital público y otro de trabajo social que respalde las condiciones mínimas de vivienda para después de la operación. Añadió que la revisión de documentos es minuciosa para impedir la comercialización.

Sin embargo, la venta de órganos, en este caso, de riñón es una realidad, afirmó el secretario general de la Coordinadora de Enfermos Renales Cochabamba, Ramiro Gonzales.

Indicó que la dirigencia, durante los últimos meses, recibió llamadas telefónicas de “extraños” ofreciéndoles en venta un órgano. “Tengo un riñoncito en venta a 15 mil dólares. Este es mi número personal pásale a alguien que este interesado”.

Acotó que, como representantes, evitaron inmiscuirse en la ilegalidad y no concretaron un encuentro con los ofertantes.

El grupo de WhatsApp de donantes tiene 92 participantes. La mayoría de los “activos” coincide en que los requisitos son mucho más exigentes en los hospitales públicos y cajas. Pero hay quienes indican que con un documento falso se puede dar el trasplante sin que el “receptor” tenga parentesco con el “donante”.

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Los avisos en muros desaparecen. Cerca al Viedma aún hay un par de letreros casi ilegibles ofreciendo un riñón.

Hay 938 pacientes con diálisis

En Cochabamba hay 938 enfermos renales que reciben diálisis, informó el responsable del Programa Renal del Servicio Departamental de Salud (SEDES), Ramiro Coca.

Los pacientes acceden a la diálisis gratuita a través de la Ley 475.

Durante los últimos dos años, la cantidad de enfermos renales aumentó. La gestión 2016 inició con 528.

Acotó que el mal fragmenta a la familia. “Tratar la enfermedad es costoso. El paciente deja de trabajar”.

El secretario general de la Coordinadora de Enfermos Renales Cochabamba, Ramiro Gonzales, testimonió la situación. Fue diagnosticado con la enfermedad hace más de un año y dejó de trabajar. No puede realizar esfuerzo físico porque le genera dolencias. “El otro día lavé mi ropa y me puso en cama”.

Coca recomendó como prevención una alimentación saludable y exámenes (creatinina y proteinuria) cada año.

Cada mes se detectan 15 pacientes en etapa crónica

Entre 10 y 15 pacientes ingresan mensualmente a la fase de la enfermedad renal crónica, es decir, al estadio cinco, informó el responsable del programa Renal del Servicio Departamental de Salud (SEDES), Ramiro Coca.

El estadio se determina a través de un análisis de sangre para verificar la tasa de filtración glomerular (TFG). Se mide la cantidad de sangre que filtra a los riñones por minuto.

En la etapa crónica quedan dos opciones: la diálisis o el trasplante de riñón que requerirá una medicación de por vida. El Estado invierte al mes, en cada paciente, alrededor de 9.380 bolivianos por la hemodiálisis, señaló Coca. El valor mínimo de un trasplante de riñón es 120 mil bolivianos, según los datos del Programa Nacional de Salud Renal, en su página del Ministerio de Salud. El Decreto Supremo 1870 establece la gratuidad de la cirugía.

El 25 por ciento de enfermos está listo para un trasplante

Alrededor del 25 por ciento de pacientes renales está listo para un trasplante de riñón. Son los que no tienen enfermedades adicionales al diagnóstico inicial, manifestó el responsable del programa Renal del Servicio Departamental de Salud (SEDES), Ramiro Coca.

“A través de evaluaciones médicas (nefrólogos) se determina si son candidatos a un trasplante”, dijo.

Señaló que la mayoría de los enfermos padece también de diabetes, hipertensión, obesidad y otros males.

La donación del órgano se da a través de un donante vivo familiar hasta cuarto grado de consangüinidad y el de muerte encefálica.

Coca explicó que para la donación cadavérica existe una lista de espera. Suele demorar principalmente porque se debe garantizar la compatibilidad entre el “donante” y el “receptor”. “No determina la antigüedad que esté en lista, sino la compatibilidad”.

Fuente: Diario Opinión