Conecta con nosotros

Economia

Exportan el primer contenedor con quinua tropicalizada hacia Alemania

La exportación de la quinua denominada ‘Uagrm-Fine’ lleva el sello de la casa de estudios superiores en alianza estratégica con el sector privado.

Publicada

el

Exportación de quinua
Foto- Uagrm

Santa Cruz 20 de enero 2024

Es un hecho histórico para Santa Cruz. Luego de casi una década de investigación y mucho trabajo en equipo, la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm) despachó el primer contenedor con 50 toneladas de quinua tropicalizada a Alemania.

Por primera vez, la universidad cruceña logró materializar el sueño de tropicalizar este cereal para producirlo en el departamento y que sirva como una alternativa de cultivo para los productores en la época de invierno.

La exportación de la quinua denominada ‘Uagrm-Fine’ lleva el sello de la casa de estudios superiores en alianza estratégica con el sector privado. El grano tiene un 99,96% de pureza, es decir, cumple con los estándares internacionales para la exportación.

El decano de la Facultad de Ciencias Agrícolas, José Luis Llanos, destacó que la universidad no solamente haga investigación, sino que también la lleve a campos comerciales, aportando a la seguridad alimentaria de Bolivia y generando divisas para el país.

El docente investigador, Ing. Marín Condori, explicó que una de las características de esta variedad de quinua es su rendimiento, que está por encima de las 1.5 toneladas por hectárea, comparada con la quinua que se produce en el altiplano que alcanza un rendimiento de 500 kilos por hectárea, es decir, la quinua cruceña rinde tres veces más.

Marín Condori, investigador y responsable del proyecto de mejoramiento genético de la quinua para la región tropical, además de resaltar los resultados del estudio que llevó 12 años de ensayo, ofreció datos técnicos que hacen augurar un despegue productivo del ‘grano de oro’ ancestral en el oriente.

En las experiencias de campo se constató que la adaptabilidad de la quinua a los pisos ecológicos de los llanos (San Pedro, Aguaí, Montero, Okinawa, San Julián, Cuatro Cañadas y Pailón) y valles mesotérmicos (Comarapa, Vallegrande y Quirusilla) es notable. La rusticidad hace resistente el cultivo a condiciones más extremas del cambio climático (sequía) y es ideal para hacer rotación de cultivo en el ciclo de invierno.

La productividad es lo más relevante. De la siembra a la cosecha la UAGRM-FINE tarda cuatro meses -la quinua del altiplano se prolonga de cinco a ocho meses- y el rendimiento promedio varía de 1,5 a 4,5 toneladas por hectárea -en el occidente es de 500 kilos-. En manos de la Facultad de Ciencias Agrícolas de Uagrm hay 130 kilos de semilla básica, de alta pureza genética, para ser ofertada y multiplicada comercialmente.

Con este panorama, la caída libre de la quinua, en todo caso, será en el Ande boliviano porque en Santa Cruz más bien está de subida.

El gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, denotó que Bolivia dejó de ser primer productor y exportador de quinua a escala mundial. En 2013 producía 68.000 toneladas, pero cayó hasta 39.000 toneladas en 2021, mientras que Perú subió de 52.000 a 106.000 toneladas. Con la exportación pasó igual. En 2013 Bolivia exportó $us 153 millones, pero cayó a $us 62 millones en 2021, mientras Perú pasó de $us 80 a 105 millones.

Recordó que en 2014 Bolivia llegó a un pico de $us 197 millones, gracias al ‘Año Internacional de la Quinua’, que destacó la quinua real orgánica.

Respecto a los impactos esperados de la quinua tropicalizada en Bolivia, el decano de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Uagrm, José Luis Llanos, proyectó un cobertura de siembra de 8.000 a 120.727 hectáreas del 2024 al 2030. En ese periodo, se perfila una producción de 180.514 toneladas que, a un precio promedio de exportación de $us 2.162, estimándose un ingreso por valor de casi $us 400 millones para la economía nacional.

El 75% de lo que produce Santa Cruz alimentando a todo Bolivia se debe convertir probablemente en un 80, 90%, porque ya se acabó el gas y hay que apuntar a la agropecuaria. Es un regalo para Santa Cruz y para Bolivia. (Datos de EL DEBER, Unitel y La Razón).

Tendencias