El ministro del Interior Rogelio Frigerio anunciará el endurecimiento de las condiciones para otorgar la residencia a los extranjeros que quieran radicarse en la Argentina. Quienes quieran radicarse en el país deberán presentar un certificado de carencia de antecedentes penales en los últimos diez años.

La medida responde a los hechos de inseguridad en los que estuvieron involucrados extranjeros y también a los que el Ejecutivo llama un “descontrol migratorio”, como lo definió el canciller Jorge Faurie hace poco más de un mes tras un reunión de Gabinete.

El oficialismo impulsa en paralelo la agilización de la expulsión de los extranjeros que delinquen o que entraron de forma ilegal al país. El plan que forma parte de un proyecto para endurecer la Ley de Migraciones, que incluye la creación de un Fuero Migratorio y una unidad de búsqueda de delincuentes extranjeros. Todas estas medidas cobraron fuerza a partir de los casos de motochorros extranjeros que tenían prohibición de entrada al país y pedidos de deportación.

Los extranjeros que no presenten el certificado que determine que en la última década no registraron antecedentes penales no podrán avanzar con los trámites para radicarse en el país.

Hasta el momento quienes iniciaban el papeleo para pedir la residencia permanente debían presentar un certificado que estableciera que no tenían condenas anteriores ni procesos penales “emitidos por las autoridades competentes de los países donde hayan residido por un plazo superior a un año, durante el transcurso de los últimos tres años”. En los tres últimos años la Dirección de Migraciones otorgó 680.000 radicaciones, encabezadas por ciudadanos paraguayos, bolivianos y venezolanos